Tuesday, December 24, 2013

Valor versus precio

21-diciembre-2013

Valor versus precio

Aunque el precio tiene gran importancia lo cierto es que “lo barato sale caro”.
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Arq. Jaime Sobrino, vicepresidente de Desarrollo de Negocios para la constructora Omega Engineering. (Suministrada)
Por Arq. Jaime Sobrino / Especial para Construcción
En la industria de la construcción al momento de escoger una empresa constructora, el método de selección en la gran mayoría de los casos se enfoca primordialmente en el factor económico, es decir, la empresa que ofrezca construir la obra por el menor costo es la seleccionada. Esta metodología, enfocada en un criterio puramente económico, cobra aún más atractivo en estos momentos dado a la situación fiscal del País. No obstante, aunque el precio tiene gran importancia lo cierto es que “lo barato sale caro”.

Los proyectos tienen todo tipo de retos e imprevistos que pueden complicar un proyecto y afectar el producto final. Por consiguiente, es importante considerar otros factores para garantizar la buena ejecución de una obra y que la misma se mantenga dentro de las expectativas del cliente.

Aparte de la oferta económica, se debe tomar en consideración la experiencia y rendimiento de la empresa. Esto puede incluir el desempeño en proyectos previos, la preparación y experiencia de su equipo de trabajo y la capacidad financiera. El evaluar estos factores en conjunto se conoce como evaluar el “valor” de la propuesta.

Por ejemplo, en Panamá y otros países de Latinoamérica, el gobierno licita proyectos públicos mayormente por mejor valor. De igual forma, en los proyectos federales del gobierno de los Estados Unidos y obra pública en la inmensa mayoría de los estados de la nación americana se utilizan procesos de “Quality Based Selection” (“QBS”) para proyectos de diseño y/o construcción.

En Puerto Rico, la selección por mejor valor también se ha utilizado para ciertos proyectos públicos pero aún quedan oportunidades de continuar implantando este tipo de selección para el beneficio de futura obra.

Estos procesos evalúan en conjunto los diferentes criterios más allá de identificar el precio más bajo. Los proyectos ejecutados, la experiencia del personal, la capacidad financiera, la calidad de su servicio y la oferta económica de cada empresa licitante son medidas a base de un puntaje establecido por el cliente. La puntuación es distribuida entre estos criterios y permite considerar el valor. El total de puntos determinado para cada propuesta es entonces comparado entre las demás ofertas para seleccionar aquella que mejor cumple con los criterios establecidos. Los puntos o porcentajes asignados a cada categoría puede variar de acuerdo a las prioridades del proyecto pero el propósito es buscar un balance para elegir una empresa con el mejor valor para el proyecto y su cliente y no solo aquella con el menor precio.

Esta evaluación más comprensiva permite identificar aquellas empresas o individuos mejores equipados y más compatibles para ejecutar el proyecto. Dentro de este marco de competencia, el cliente, entonces, puede tomar una decisión más informada sobre a quién adjudicar tomando en consideración los distintos componentes de la propuesta y sin limitarse estrictamente al costo más bajo. Al momento de ejecutar una obra, seleccionar un buen equipo de trabajo es una decisión crítica ya que el valor de trabajar con profesionales con experiencia exitosa y conocimiento no tiene precio.

El autor es arquitecto licenciado, pasado Presidente del Instituto Americano de Arquitectos, Capítulo de Puerto Rico y miembro de la Junta de Gobierno del Colegio de Arquitectos y Arquitectos Paisajistas de Puerto Rico (CAAPPR). Es Vicepresidente de Desarrollo de Negocios para la constructora Omega Engineering con oficinas en Puerto Rico y Panamá. Puede acceder awww.omega-eng.net o escribir a jsobrino@omega-corp.net.